lunes, febrero 22, 2010

Creaciones peruanas



Tashay es la empresa con la que Cecilia del Valle, artista visual, restauradora y diseñadora de modas materializa su deseo de lanzar al mercado una variedad de accesorios inspirados en representaciones gráficas de la América precolombina. La diseñadora entreteje con habilidad la aspiración de los antiguos habitantes de estas tierras de cosechar en abundancia – la palabra quechua Tashay evoca la confianza con la que los antiguos peruanos se entregaban a la producción artesanal- y el deseo de estar a la última. Sus prendas hechas de alpaca bebé, lino o seda y recubiertas de bordados, cuentas o petroglifos de plata, tienen el toque preciso de contemporaneidad. Un punto a favor de la tendencia a lucir pre-histórica y moderna a la vez. Del afán de mirar fuera sin descartar la mirada de casa. Cubrirse los hombros o el cuello aporta lo suyo en el arte del vestir: permite combinar y sin gastar mucho.

lunes, febrero 15, 2010

Pequeños dictadores

Cuando uno lee jamás pierde el tiempo, dice uno de los personajes de B. en una novela de corte catastrófico. El hombre había pasado varios años en la cárcel y al salir consideraba que la lectura le había permitido afinar su diálogo con la vida. ¡Cuánto le debía a su dedicación para recorrer tomos completos de la novelística del siglo XIX - casi todos autores ingleses y franceses- sin acercarse ni de casualidad al aparato de tv.! El pasaje de la obra de B. me viene a la cabeza al momento en que observo la arena iluminada por el sol y el vaivén del mar. Veraneo, sí, dedicada a la lectura. Para más datos acabo de terminar, no el mencionado texto catastrófico, sino ´Pequeños dictadores´ del peruano Luis Felipe Gamarra. Se trata de una investigación periodística que retrata el ir y venir de funcionarios corruptos vinculados al poder de la funesta dupla Fujimori- Montesinos. Anoten ustedes que una lectura me permitió recordar la otra. Suelo dejar abierta la puerta de las asociaciones. En este punto podría mencionar el quiebre en mi relación con lo que a distintos ritmos e intensidades, ha sido durante buen tiempo mi actitud frente a los medios. Para recordarlo en el lenguaje de U. Eco, mencionaré que desde los años sesenta y a lo largo de los setenta aquellos que equiparaban la llegada del apocalipsis al poder que acumulaban los medios de comunicación, practicábamos la misma abstinencia televisiva que la del preso de la novela que empecé citando. Los integrados en cambio, sin pensar que la tecnología de la comunicación ponía la cultura de cara al consumo, celebraban la posibilidad de contar con cine en casa a más de la información y el entretenimiento de los programas en vivo. Había de seguro matices, pero Eco los pasó por alto. El caso es que incluirme en el primer grupo, da para comprender que durante buena parte de la primera década del siglo XXI, desatendí las noticias sobre los juicios que se les seguían a los representantes del régimen totalitario. Con el rabo del ojo veía la tv. y hacía una síntesis. Me sucede hoy con el libro de Gamarra -que incluye crónicas de Carlos Paredes y Juan Manuel Robles- que he podido enmendar vacíos. Todo es muy crudo y nada muy fino. Para mencionar el relato sobre la ex fiscal de la Nación Blanca Nélida Colán, una mujer de una trayectoria honestísima que a cambio de los dólares agujereados que le proporcionó el todopoderoso Montesinos, traicionó la fe que la ciudadanía tenía en su cargo. Juzgada por archivar casos de corrupción y hasta de asesinato purgó condena durante siete años y en el 2008 obtuvo su semilibertad. Los otros personajes del libro: Alejandro Guerrero el reportero, Laura Bozo la conductora, Matilde Pinchi Pinchi la confidente, Martín Rivas el soldado y el general Nicolás Hermoza Ríos, pequeños dictadores al servicio de los dos peces gordos, son también tomografiados por el ojo de tan exhaustivos periodistas. De hecho el valor del libro, no es sólo para un ex-apocalíptico/a. Quienes escriben son investigadores de primera. Para alegrarse del periodismo con rasgos literarios que se forja en el país. Por otro lado, permítanme una perogrullada. Si sigue siendo cierto que cuando uno lee no pierde el tiempo, con la tv. selección y análisis mediante, tampoco.
Imagen: Milton Glaser.

martes, febrero 09, 2010

La nada hoy

Terminé la novela de Houellebecq que estaba leyendo. ´Plataforma¨se publicó el 2001, un año antes de que los francos se volvieran euros, para nosotros `neuros` habida cuenta de que la conversión nos pone en plan misio. ´Plataforma´ tiene seis ediciones y su autor hace rato cosecha los frutos de haber sido celebrado como un hito de la literatura que filosofa. Hay quienes ubican a H. en fila detrás de Sartre. ¡Ay con la nada! El protagonista de la novela vive en depre pero redime su pesar con el sexo. Heterosexual sin error u omisión echa mano de la versión dos a la vez, se inclina al exhibicionismo y disfruta del sexo de paga como quien abre una lata de atún. Porsupuesto que ni Freud ni sus epígonos aparecen en medio de tanta gozadera. Quien sabe las prolijas descripciones de glandes y clítoris, deban lo suyo al poco conocido Andrea Vesalio, padre de la anatomía moderna. El punto si quieren ustedes, el G o en todo caso el H por el apellido del autor, es que las reflexiones sobre el malestar de la cultura corren a cuenta del protagonista, un burócrata del arte que no se compromete ni con la irreverencia contemporánea. Tras la muerte de su padre decide tomar unas vacaciones en Thailandia donde conoce a Valerie, una exitosa funcionaria de turismo. Siendo franceses ambos y viéndose por primera vez en el sudeste asiático, la relación no prospera sino a su vuelta a casa. Ella a sus ventiocho años no había encontrado nada mejor que volverse operadora de una agencia de viajes y si le gusta Michael de cuarenta, es precisamente por lo que él no gusta de sí mismo. Los orgasmos entre ambos y sus invitadas van y vienen en un marco empresarial, el trabajo de ella al que finalmente él termina sumándose; y político, la estela de prerrogativas de Occidente en Oriente abierta hace ya buen tiempo como una herida del planeta por lo que podría llamarse el saqueo civilizatorio. En el entre tanto van y vienen hombres maduros, blancos, calvos, barrigones, y mujeres jóvenes color canela cuyas pieles firmes están llenas de la sabiduría de entregarse a vivir haciendo gozar al otro. Un toque de terrorismo cierra el relato para dar a entender al lector que el dolor sólo puede vivirse como paréntesis y de modo catatónico. Entonces otra vez el sexo, otra vez la nada. Diré que no es mi modo de ver la vida, pero el fulano la mueve. Su estilo se manifiesta como giros imprevistos que dan fluidez al relato. Por lo demás me mantengo en el plan de evasión que propicia el arte hasta en el carro. Las novelas favoritas de Vargas LLosa en versión sonora ayudan bastante. Si de lo que se trata es de no ser engullida por la nada...

Imagen:a partir de John Heartfield.

lunes, febrero 01, 2010

Opus Gay

El syllabus del curso de historia del diseño que tendré a mi cargo este semestre cobra forma. Toda la semana me dediqué a estudiar los orígenes de la comunicación gráfica con parada en las antiguas civilizaciones: Sumaria, Egipto y China antes de recalar en Grecia y Roma. Tuve que leer y buscar imágenes que compartir en el presentador de la MAC, así que como dice una amiga me usé toda. Hemisferio cerebral izquierdo para el ánálisis, hemisferio derecho para la selección de imágenes. El fin de semana volví al presente. La conversación en la playa recaló en los temas de la agenda local. Uno el desastre en el Cuzco. Quedó en el aire la pregunta que surge cada vez que ocurre un fenómeno de tal magnitud. ¿Las autoridades tienen o no manera de prevenir un desastre natural? La información suele girar en torno a la atención a la región afectada con un tácito voto de aplauso a la gestión gubernamental. Hace falta un reporte técnico al respecto. Dos la candidatura de Bayly. ¿Así que un político tradicionalmente identificado con el Opus Dei aplaudía la candidatura presidencial del ciudadano-personaje de la farándula–entrevistador televisivo? Alguien sugirió que a la agrupación religiosa le había nacido una facción identificada como el Opus Gay. Tema tres, ¿y los horarios de los jóvenes para entrar y salir de las discotecas de Asia?, ¿y los padres que se dejan llevar por las normas de lo que se dice se hace hoy? Conmoción. Hipótesis de madres comprometidas con la educación se manifestaron sobre el uso del no. Que lo haga fulanito/a porque sus papás lo/a dejan, no quiere decir que tú lo harás. Y no. Cuatro, ¿qué les pareció Avatar ? la pela de Cameron. Buena, mala, yo no la vi en 3D dijo alguien, ¡no! En fin, hoy vuelvo al estudio en el ítem de la creación de la imprenta, lejos todavía de facilidades tecnológicas como ésta la de bloggear el diario existir. Fue el origen sin embargo de la tecnología y los modos de comunicación actuales, de allí el sentido de ofrecer a los estudiantes de diseño la dinámica del oficio al que se dedicarán. La imaginación visual, como el arte y como el diseño mismo- al que muchos no reconocen aún su propio recorrido-; tiene una historia. Los titulares como el de arriba quién sabe, pero disparan la lectura.