miércoles, enero 31, 2007

¿Audacia es el juego?

La diversidad de rasgos étnicos en nuestro país salta a la vista. Nuestra historia poco ha tenido sin embargo, del mundo "United Colors of Benetton". El tono claro de piel ha sido durante muchos años el look más conveniente para circular en ambiente sofisticados y pudientes. En el gobierno del ex- presidente Alejandro Toledo circulaba incluso una anécdota sobre la discriminación de la que el mismo mandatario había sido objeto (y sujeto).

Don Alejandro Celestino Toledo Manrique estaba todavía lejos de ceñirse la banda presidencial cuando fue detenido a la entrada de un club. Doña Eliane Karp Fernenbug su esposa de nacionalidad belga, pretendía ingresar acompañada de quien se consideró debía ser su chofer. ¿Dijo racismo? La asociación tenía como miembros, sólo gente de tez white enough.

Sería inútil negar el racismo en el Perú, aunque señalar que somos un país mestizo conformado por sucesivas oleadas de inmigrantes europeos, africanos, asiáticos y estadounidenses no deja las cosas en claro. El habitante indígena sigue siendo en proporción, el mayormente discriminado.

A la defensa de este sector de la población oriundo de la sierra, apuntó el Operativo Empleada Audaz en una playa de Asia, balneario ubicado en el kilómetro noventa y nueve de la Panamericana Sur. La intervención que se realizó este último domingo, contó con voluntarias ceñidas de uniformes de empleadas domésticas, y voluntarios con inscripciones contra el racismo. La convocatoria de varias instituciones, fue liderada por La Mesa contra el Racismo de la Coordinadora Nacional de Derechos Humanos.

Me aúno a los reclamos contra el racismo, pero discrepo con el planteamiento de la intervención. Se dice que en ese balneario a las empleadas del hogar no se les permite bañarse en el mar, ¿cuesta acaso mucho considerar que quien se encuentra en un horario de trabajo no puede sino concentrarse en la tarea que le corresponde? Para contrastar lo dicho, ¿la Municipalidad de Chilca, un distrito cercano a Asia, debiera también permitir a sus barrenderas (en la imagen), un baño de mar en su horario de trabajo?

Siguen preguntas. ¿Son particularmente discriminadores los peruanos que han logrado edificar sus casas de playa en Asia?, ¿a todo joven de familia de bajos ingresos le corresponde burlarse del veraneo de quienes en virtud de sus haberes ( obtenidos no sólo por corrupción) veranean en Asia?, ¿alguien quiere tomarse un minuto para pensar si ese tipo de operativos es el camino para comenzar a sanar nuestras heridas en materia de discriminación?, ¿es audacia el juego de reemplazar la iniciativa del otro, en este caso las empleadas del hogar?, ¿no suena a un rostro lavado del viejo populismo?, ¿al consuelo inmediato de "salir en la foto"y de tener mucha prensa?

Como se sabe, atacar al otro es un recurso psíquico más a la mano que el intento de acercarse. La falta de empleo y de salarios dignos para la mayor parte de la población llevan a tantos jóvenes a forjar una actitud escéptica. Los malos son los que tienen la posibilidad de tomar vacaciones, lograr un descanso resulta la expresión misma de la lucha de clases.

Voto por la labor silenciosa, la negociación a mediano plazo, la educación infantil.

martes, enero 30, 2007

Murphy y yo


Me ha venido a la cabeza la ley de Murphy. Aquella del if anything can go wrong, it will. La formuló Edward Murphy, ingeniero aero espacial nacido en las tierras del tío Sam en 1948, y desde entonces la susodicha ley ha incursionado en terrenos ajenos a la tecnología. Aplicada a la vida cotidiana la ley de Murphy adquiere un indudable perfil paranoico. Basta mencionar la evaluación de posibilidades ante el traslado de una tostada untada con mermelada. De caer al piso Murpy`s dixit, ¡caerá del lado untado con la mermelada!

Tontería mayúscula o no, estoy en esas. Acabo de quemar la moledora de café. A uno no le pasa conectar un aparato de 110 voltios a 220 v. hasta que le pasa. ¡Si logro echar mano a quien cambió de lugar el tranformador!

Sumen ustedes que anoche volé a comprar entradas para "Sueño de una noche de verano", comedia de Shakespeare atemperada al humor local. Creí que iban a estar agotadas dada la fiebre que desata el teatro últimamente en Lima; así que me alegré, al parecer en demasía, cuando desde la ventanilla del teatro me respondieron con un si hay todavía. No cotejé la butaca que me ofrecían y entré. Un aforo lleno, pero ¡uay! Todo un budín con el agravante que desde la fila Q de la mezanine del Teatro Británico, uno casi adivina los parlamentos de los actores. Es tan mala la acústica. ¿Por qué ofrecen esos espacios?

Me había guiado por el nombre de la directora, Rocío Tovar y su éxito anterior "Perú ja ja". Aquí sin embargo, la profesional del teatro parecía haber sufrido una mutación. El humor desplegado era televisivo en su peor sentido. ¿Por qué repetir esa propuesta anuladora de sensibilidades de la caja boba? Amarillaje, disfuerzo y pasos de baile por actrices y actores que parecían escobas.

Que no me pase. Quiero decir, otra vez eso de querer hacer todo rápido. Ayer con las entradas y hoy con la moledora. La imagen de Anne Leibovitz arriba, evoca esos momentos en los cuales sin decisión de por medio, se nos exige jugar roles y más roles. Es entonces cuando, si algo puede salir mal, sale mal.

lunes, enero 29, 2007

Desnudamientos en el museo


La invitación al desnudamiento proviene del Deutsche Bank, entidad que viene dedicando el 2007 a pasear su colección fotográfica por esta parte del globo. Coauspicia el Museo de Arte de Lima (MALI), institución donde la muestra "Más de lo que los ojos pueden ver" permanecerá hasta marzo próximo, antes de seguir rumbo a Santiago de Chile, Sao Paulo y Buenos Aires.

Aclaremos. La colección fotográfica exorta a desnudar la mirada y nada más. ¡Conservemos nuestro grado de civilización! De lo que se trata es de retirar el velo que impide ver con intensidad y novedad el mundo. De otro modo, el nombre de la muestra indicaría que asistimos a una exposición en la cual el elemento visual se ha integrado a los otros sentidos (olfato, oído, tacto), o que hemos sido convocados para ver lo nunca visto y no es así.


Decía Susan Sontag, que la fotografía permite colocar nuevamente la realidad bajo nuestra vigilancia y sin apremio. Los temas son inagotables. Desde el retrato de formato grande -los ojos del modelo de arriba causan escalofríos al seguir al visitante por toda la sala- hasta la manipulación de la imagen.

La mesa redonda del centro parece graficar aquello de la federación de "Yoes" que nos conforma. Un sólo individuo está repetido más de una docena de veces. ¿No es cierto que en ocasiones como la que se ve, quisiéramos desplegar múltiples "Yoes" para que cumplieran nuestros deseos al mismo tiempo?

Sea para documentar una realidad del modo más realista, o para intepretarla de acuerdo a quien hace el clic, el arte de la cámara invita a un continuo redescubrir. En este caso, la revuelta contra la visión ordinaria de este grupo de artistas alemanes, la reafirma para decirlo con palabras de Sontag, como un arte no menos digno que la pintura.

viernes, enero 26, 2007

Ecología de imágenes

A modo de aperitivo de las dos exposiciones de fotografía peruana y alemana que pienso visitar en la tarde en el Museo de Arte de Lima (MALI), seleccioné algunas imágenes de la estadounidense Anne Leibovitz (1949). Más conocida por sus retratos de personalidades del espectáculo, colocó en la portada de la revista "Rolling Stones" a John y Yoko Lennon ovilladitos en acto de amor; Leibovitz se ha dado tiempo también para mostrar algunos nuevos rostros de la mujer.





Una de sus retratadas célebres Susan Sontag (1933-2004), autora del imprescindible texto "Sobre la fotografía"(1977), termina su ensayo señalando la necesidad de una ecología de imágenes.

Jamás se agotarán dice, pero para que formen parte del mundo real se necesita aprender a conservarlas al mismo ritmo que las consumimos. "La vista flaca" seguirá poniendo su granito de arena. Buen fin de semana, que estén ahí.

jueves, enero 25, 2007

Administrar la nostalgia

Nostalgia según el diccionario, es la tristeza que acompaña el recuerdo de épocas a las que uno se siente vinculado afectivamente. Administrar ya sabemos. Supongo que practiqué esa suerte de ingeniería del sentimiento anoche. Comencé a bajar canciones top de la lista Billboard de los años setenta, jugando a recuperar las huellas que el sonido debía haber dejado en alguna parte de mi cerebro. Adelántandome no muchos años al desarrollo de la tecnología, me hacía la idea de que iba a poder asociar el autor y su canción a imágenes de la época. ¿Cabe dudar de la no muy lejana aparición de un cumplidor aparatejo que nos permita lo mismo por el precio actual de un Ipod o una Palm?

Uno ha de colocarse el audífono del portable en la oreja, y un par de transductores en sus sienes. Las imágenes depositadas como ondas eléctricas en la memoria, se volverán entonces nítidas en el visor del mismo aparato. Al ser testigos de nuestro pasado tendremos incluso la posibilidad de compartir el momento con alguien muy íntimo. Ahí estoy, mira, llegando a clases. ¡Uay, que mal iba a pasarla ese día! ¿Cómo podía creer que las cosas fueran así?

Les confieso a ustedes que desde hace mucho combato la expresión, "en mi época". Me ha parecido siempre más apropiado decir en mi adolescencia, a los quince, a los veinte, veinticinco etc. Se me erizan los pelos cuando alguna contemporánea saca a relucir aquello, de la música de nuestra época. Digo entonces o pienso segun las circunstancias, ¡ah! eso es cuando teníamos trece años. La secundaria, si.

Quien sabe dónde habré cogido tal prurito. Puede que sea mi afán de seguir pegada a la música. Recuerdo mi enganche natural con el rock de "Los Tetas" y con el de "Ilya Kuryaki & the Valderramas". Cierto que en cambio no soporto el reggae, lo siento Sebastián, hijo querido, seguidor de Marley padre.

Puede también que sea el deseo de seguir en la vida. La sociedad humana conspira para que cada generación considere "su época" los años situados alrededor de los quince. Luego intenta cancelarnos. Al género femenino nos tiene reservados productos especiales para vivir del recuerdo. Boleros y cremas con la promesa de un segundo debut (el tercero está descartado).

Volviendo a la colección de Billboard fechada por semanas, me han interesado menos las canciones de los consagrados que de una manera u otra han seguido sonando, que las de aquellos que luego de llegar momentáneamente a la cima fueron sacados de circulación.

¿Qué habrá sido de sus vidas'? ¿Administrarán también su nostalgia o vivirán sólo de recuerdos?

miércoles, enero 24, 2007

Pensar por cuenta propia

Recuerdo unas líneas del maestro R.Kapuscinski (1932-2007) en "Los cínicos no sirven para este oficio" (1999). El texto del periodista polaco fallecido ayer me ha rondado siempre por efecto de su mirada aguda y su lenguaje sencillo. R.K. dialoga con un auditorio conformado por estudiantes italianos sobre el papel de los medios.


Siembra la inquietud en sus jóvenes mentes, si acaso éstas pensaban ofrecerse dóciles y crédulas ante todo lo que aparece en la prensa. Más tarde podrán elaborar su propio juicio y su actitud crítica.

El asunto es recordar que las empresas periodísticas se mueven en el negocio de la información y por tanto que nada tiene de raro que hagan prevalecer su interés por vender. Más que curioso es que nuestra civilización haya otorgado a los medios de comunicación la función de formar opinión.

He escuchado en Lima a cínicos de calibre decir que las páginas de la sección que editan están sólo llenas de "lo que le gusta a la gente". Léase que su sinceridad sintoniza con lo que hay, sin necesitar siquiera argumentos del tipo, la búsqueda de la verdad y la objetividad de la noticia. ¿Educar? Vaya usted a otro planeta, dicen, ¿dónde se ha visto?

Kapuscinski observa otra realidad. Una buena parte de lectores, radioescuchas y televidentes vuelven a casa cansados para estar sólo un rato con su familia. Reciben sólo unos minutos de noticias sin reparar en lo que sucede en sus mentes. ¡Pero si nos están proponiendo pensar del mundo y de una sóla manera!

Agrega R. K que los medios "son tan influyentes e importantes que han empezado a formar un mundo propio". Curioso, cuando su objetivo real es solamente "no ser desbancados por otros grupos".

Pienso en la necesidad de difundir esta idea central más allá del ámbito universitario. Toca explicar con paciencia al no iniciado como lo hacía Kapuscvincki las estrategias que se emplean para "hacer creer". "En los periódicos se puede llevar a cabo una manipulación según lo que se escoja colocar en la primera página, según el título y el espacio que dedicamos a un acontecimiento...Y sin decir mentiras".

¿Será un imposible desear y desearse pensar por cuenta propia? Quien sabe el temor sea como sugiere la foto de arriba, perderse en los laberintos de la civilización.

Imagen: Valie Export

martes, enero 23, 2007

Sexualmente hablando

Una cosa es usar la propia fantasía como materia prima para una novela y muy otra, escribir sobre la fantasía de un buen número de humanos respecto al sexo. Gore Vidal (1925), el escritor norteamericano de ideas políticas ultraliberales lo hizo en un volumen editado a inicios del nuevo siglo. He usado su vendedor título como encabezamiento: "Sexualmente hablando".

La publicación que reúne crónicas, ensayos y entrevistas me vino a la cabeza al leer una nota periodística sobre el premio que recibirá el peruano Jaime Bayly, el mismo que se inauguró con "No se lo digas a nadie", en Miami. Bayly será reconocido en mayo próximo, dizque por la lucha emprendida para lograr la igualdad de derechos de quienes se asumen como gays. Nunca he creído que esa haya sido su intención, pero en fin. La institución que le ofrece el premio es La Alianza Gay y Lésbica contra la difamación (Glaad).

A Gore Vidal un individuo que asumió su diferencia sexual en 1948, la palabra gay le produjo siempre urticaria. Prefiere decir maricón, aunque él mismo haya insistido en su naturaleza bisexual. Su pareja por más de treinta años fue un hombre con el que convivió en la ciudad de Ravello, Italia. Howard Austen murió en el 2003 y G. V. se trasladó a Los Angeles, donde reside hoy.

Entre las opiniones más recalcitrantes del autor de "Myra Breckinridge", "Juliano el apóstata" y docenas de otros títulos, hay que mencionar las relativas al 11 de setiembre. A juicio de Gore Vidal, el plan de ataque a las torres gemelas era conocido por la administración Bush y si no lo detuvo fue para justificar la incursión el ejército norteamericano en Afganistán. A sumar como motivo del juego macabro de la mafia que preside el gobierno de su país, su codicia por el petróleo.

De la sexualidad
Para Gore Vidal la sociedad humana ha sustentado la necesidad de las relaciones heterosexuales, matrimonio incluído, con el norte de la supervivencia de la especie. Un argumento que debería renovarse dada la superpoblación del mundo. Los humanos estamos hechos para la poligamia y el ejercicio de la bisexualidad, así que si las parejas casadas mantienen su unión es más por respeto que por deseo. En los años setenta decía ya el escritor antitabúes que se empezaba a confesar lo que en verdad ocurría en la cama matrimonial.


Con el correr de los años, tanto el hombre como la mujer recurren a imágenes mentales para excitarse con un cuerpo que no les dice ya nada. Una manera de fingir en función de la ley y la costumbre. Ahí está el chiste en circulación. Luego del clímax ella le dice a él. "Te diré en quien estaba pensando si me dices en quien pensabas tú".

En una de las entrevistas de "Sexualmente hablando"fechada en los setenta, se nota la necesidad manifiesta de un grupo marginado como lo era el homesexual de hacer causa común. Larry Kramer, un activista gay que luchaba por medidas para ayudar a los afectados por el Sida, pide a Gore Vidal que deje de lado el tema de la bisexualidad. "Creo que lo que tenemos ahora son millones y millones de personas que se limitan a vanagloriarse de estar enamorados o sentirse atraídos por alguien de su mismo sexo...Sólo queremos tenerle a usted sin reservas y en toda la extensión de la palabra en nuestro bando".

Debe ser lo que ocurre con Bayly. Su imagen pública se convierte en un recurso para defender una causa. Termino con una observación del mismo G. V. en el prólogo de su libro. Alude a la confusión de que existen dos bandos, el bueno heterosexual y el malo gay. ¿Se trata acaso de intercambiar los adjetivos? Más bien dice Gore Vidal, de pensar en un sólo bando humano. Si cada quien tiene el derecho de escoger quien le despierta pasión, lo demás es política, deseo de coacción.

Imagen:Francesco Clemente

lunes, enero 22, 2007

Ventanas que no son las de Windows


Soñé anoche con una mujer que casi flotaba silenciosa cerca de una fuente. No puedo decir por qué, pero tan sólo verla comprendí que velaba sobre mis actos como una guía. Aún dormida podía yo darme cuenta de que había captado algún plano distinto de la realidad. La imagen femenina visible sólo para mí, me hacía partícipe de las presencias que guían la suerte de los humanos en el mundo. El efecto era una armonía particular, una gran paz.

Me he despertado pensando en la poesía de la secuencia. Pero también, en mi manera de discernir sobre esas criaturas que supuestamente tienen a cargo ayudarnos a seguir el camino de nuestras vidas. Sea un tema, una idea o solamente una intuición, no suelo dedicarle a ésta ni siquiera un minuto durante la vigilia. El esoterismo, la anunciación o las profecías para decirlo así, me son ajenas.

Ejem ejem. Apenas recordé el sueño comencé a buscar entre mis libros alguna pista. Antes que "La interpretación de los sueños" de Freud, elegí el "Libro de los seres imaginarios" de Borges. He aquí la coincidencia. Las Nornas son tres figuras de la mitología escandinava que suelen estar cerca a una fuente, al pie de un árbol que es el mundo. ¡Vaya el mundo es un árbol! Lo suyo es urdir nuestra suerte y sus nombres son un poema: Pasado, Presente y Porvenir.

Al parecer inicio una semana con varias preguntas. ¿Surgirán las otras dos Nornas en mis nuevos capítulos nocturnos? ¿Cuál de ellas será la que ví? ¿Será mejor hacer a un lado el asunto y sumergirme en la vida cotidiana?

Descarto esta última posibilidad. Es bueno salirse de la órbita por una rato y valorar en mucho esas ventanas abiertas diariamente, y que no son las de Windows, después de cada laboriosa jornada: los sueños.
Imagen: Kandinsky

viernes, enero 19, 2007

Reclamos visuales



Me preguntaba ayer, por qué no se atiende el reclamo que han hecho suyo algunos vecinos de San Isidro. Recuerdo haber visto anteriormente el mismo estilo de protesta ante la posibilidad de instalar un jardín de infantes y un restaurante en una zona residencial. En este caso está en juego el trato cordial con la sede de un país amigo.

A la espera de que la nueva autoridad municipal verifique las razones de ambas partes. Un buen fin de semana para ustedes. Que estén ahí.

jueves, enero 18, 2007

Del país, una muestra

8.20 am, calle Los Pinos, distrito de San Isidro, Lima, Perú. Acabo de llegar a la entrada del Consulado de España y el vigilante, situado en la puerta, me indica que debo hacer cola. La hago. Mi interés es legalizar un título universitario para enviarlo a la Madre Patria. Se que el trámite es personal, aunque no me he preocupado en averiguar en que consiste. Un asistente me ayudó a obtener la cita a través de la web y sacó dos fotocopias al título.

Primera sorpresa. La mujer que está delante de mí, tiene su cita a las once y media, pero según me dice ha decidido venir temprano porque sino figúrese a que hora estaría saliendo. Sonrío tratando de ocultar el pasmo que me produce su razonamiento. He comenzado a sentirme Uncumber, la niña del relato de ciencia ficción que vive en un mundo donde toda comunicación con el exterior funciona a través de cables. Es un efecto de andar pegada a la Red y de que no me había visto necesitada de hacer un trámite sabe dios desde cuando.

Segunda sorpresa. El señor 417 según leo en su fotocheck, yo soy la ciudadana 416, me pregunta si compulsar es lo mismo que legalizar. Le respondo amable que así es, y que como no tenemos el hábito de usar el verbo compulsar, suena divertido saber que todos los de la cola estamos aquí para lo mismo:  compulsar. La gracia debe haberme salido del inconsciente; lo cierto es que lo limeño es legalizar. Y eso. 

Tercera sorpresa.Ya en el interior, otro vigilante anuncia que los pagos en ventanilla deben ser exactos. No hay vuelto. Quienes hemos traído sólo billetes entramos en pánico. ¿Qué hacer? Nadie puede salir del local. La solidaridad espontánea hace que unos ayuden a otros a cambiar efectivo. Alguien comenta entonces que así somos en el Perú, que nos ayudamos en las malas. La idea funciona antes de descubrir que el vigilante, también compatriota, ha inventado la directiva. Un señor de los primeros en la cola ha sacado su billete de cien soles y el empleado le ha reintegrado la diferencia sin decir ni mús. Es más peruana la zozobra, pienso. La bola que se hace correr para ejercer el poder.

Cuarta. Una señora con un niño que debe tener cuatro años, lo deja correr a su albedrío. Los de la cola observamos que su madre no sabe dirigirlo. Un señor dice ´en mi época no era así´. En una de esas, el chico mete la mano a la faja transportadora de carteras. ¡Dios! Felizmente no hubo un accidente. Señora, pienso, si no le ha puesto límites a su hijo hasta el momento, comience ya. En los hechos menudos y en nuestro comportamiento en los espacios públicos aparecen o no nuestros gestos civilizados.

No hay quinto malo. En la calle, de la casa del frente   cuelga un cartel que declara no grata la presencia del Consulado.  Quienes allí viven se han erigido en portavoces de los vecinos.  La zonificación municipal califica la calle de Zona residencial, por tanto no puede haber una oficina allí Además, que con tanto movimiento de gente.  ¿Se mudará el Consulado? ¿Será que la Municipalidad hace oídos sordos al reclamo vecinal? ¿Será un capricho del vecindario?

Los lazos con un país amigo, debieran generar frases amables, no las que se ven. Hay que retirar la banderola o, si la queja es justificada, atenderla.

miércoles, enero 17, 2007

Basta de cuentos

Psicólogo, filólogo y profesor de psiquiatría en la Universidad de Stanford, Paul Watzlawick se ha especializado en pensar a contracorriente. En su opinión, vivir es un permanente juego de dificultades que hay que enfrentar. De ningún modo, un juego de preguntas y respuestas sobre la búsqueda de felicidad.

No se trata sin embargo de amargarse la vida. Decirse a cada paso, “me va a ir mal” logra que lo dicho se cumpla. Cuidado. Viene al caso distanciarse de historias como la que sigue. “Un hombre quiere colgar un cuadro. El clavo ya lo tiene, pero le falta un martillo. El vecino tiene uno. Así pues, nuestro hombre decide pedir al vecino que le preste el martillo. Pero le asalta una duda: ¿Que? ¿Y si no quiere prestármelo? Ahora recuerdo que ayer me saludó algo distraído. Quizás tenía prisa. Pero quizás la prisa no era más que un pretexto, y el hombre abriga algo contra mí. ¿Qué puede ser? Yo no le he hecho nada, algo se habrá metido en la cabeza. Si alguien me pidiese prestada una herramienta yo se la dejaría enseguida. ¿Por qué no ha de hacerlo él también? ¿Cómo puede uno negarse a hacer un favor tan sencillo a otro? Tipos como éste le amargan a uno la vida. Y luego todavía se imagina que dependo de él. Sólo porque tiene un martillo. Esto ya es el colmo. Así nuestro hombre sale precipitado a casa del vecino, toca el timbre, se abre la puerta y antes de que el vecino tenga tiempo de decir buenos días, nuestro hombre le grita furioso. ¡Quédese usted con su martillo! ".


Como para repensar aquello de que forjamos nuestra dicha desarrollando sentimientos de tolerancia, honradez y confianza. Darles cabida requiera tal vez, que nos exploremos interiormente con la misma paciencia con que lo hacemos frente a un espejo. Aspirar a ser un humano cabal sin mirarse a si mismo, es un cuento.

Imagen : Rudolph Hausner, 1993.

martes, enero 16, 2007

Anestesia cotidiana


Tomar un decisión y aliviar el dolor del mundo. Sorprende la sugerencia del periodista Osvaldo Bayer en su artículo : Un día occidental y cristiano. El relato comienza con un paseo de Bayer, argentino que reside en Alemania, por el Rin. Alguien le alcanza un volante que explica las paupérrimas condiciones de vida de los Lakota-Sioux, población indígena natural de Dakota, EE.UU.. Los Lakota fueron despojados de su fuente de sustento por los cazadores blancos que llegaron a la zona y sus descendientes han vivido sin esperanza. El impreso patrocinado por la Iglesia Católica, solicita a todo ciudadano alemán la contribución en pro de la salud y educación infantil de los indios norteamericanos. En tiempos de globalización, su sugerencia es globalizar también el amor al prójimo.

Bayer lee luego en el diario, que Bush ha decidido un nuevo envío de soldados a Irak. Cuenta con un presupuesto de mil millones de dólares. ¿Como? Y por qué se pregunta entonces, "el Papa no va a Dakota del sur e inicia allí una huelga de hambre ante la realidad de los indios y el hecho de que se va a gastar una cifra no cristiana para matar y bombardear".

Hemos llegado a acostumbrarnos a las contradicciones flagrantes de nuestra civilización. Basta pensar en la lista de tantas otras situaciones que con sólo recuperar nuestra adormecida sensibilidad, quisiéramos que encuentren una salida y ya. Habría que decir paren el mundo que aquí me bajo, o proveerse del valor de un mártir cristiano para entregar la vida por esa causa.

El terreno del arte es fértil en iniciativas para ironizar en torno a nuestra anestesia cotidiana. El italiano Maurizio Cattelán sabe hacerlo de manera punzante. Decidió esculpir a Juan Pablo II cuando todavía estaba vivo, arrasado por un meteorito y tituló su obra: La hora nona (1999). Podría reeditar la situación que se ve en la foto con Benedicto XVI entre los sioux.

A un trío de niños a los que colgó de un árbol en un parque de Milán, otra vez los modelos podrían ser indígenas made in usa. Y ha colocado también la figura de un vagabundo en una calle, para demostrar que podía permanecer allí por horas ante la indiferencia de los transeúntes. ¿Qué tal un luchador indígena hecho en polyester, para una vereda del Central Park?

La obra de Catelán apunta al escándalo con la ayuda de los medios. El escultor que cultiva también el perfomance, sólo dice: Lo real es peor que mi obra.

lunes, enero 15, 2007

El hilo de la madeja

El idioma inglés decora los tórax en expansión de los niños locales. Sumen ustedes que los infantes de esta parte del mundo, entretejen vigilia y sueños con imágenes del game boy, la estandarizada consola portátil que exige el accionar conjunto, de mano-ojo y una básica población neuronal. La diversión no es sólo para los primeros de la clase, pero sí para quienes tiene padres que pueden hacer el desembolso de por lo menos cincuenta dólares. ¿Alguien se opone?

El adulto que se interesa en estos menesteres corre el riesgo de ser enviado a terapia por el gran hermano, esa figura fantasmal que nos vigila para asegurar que todos seamos normales. Léase, dóciles ante imposiciones de todo tipo. El big brother es particularmente sensible a la crítica anti-globalización. ¿Por qué enfilar contra las inocentes letras impresas en un polo, o hacerle un mohín a esa maravilla tecnológica que mantiene a los niños en casa y sin tanta televisión?

Hablando de hacer cuestión de estado de algunas cosas. ¿No está acaso el gobierno peruano dando sus primeros pasos en dirección a una reforma educativa? Cierto y enhorabuena. Es sólo que yo decía…como en el poema de Vallejo: "(...) ¿qué hacer?/!Ah! desgraciadamente, hombres humanos,/hay, hermanos, muchísimo que hacer./"

Mis nuevos amigos de diez y once años en la foto, tienen felizmente otros recursos. Uno es campeón de tenis, otro obtiene muy buenas notas y al tercero le gusta investigar en la Red. Por lo demás no han nacido analistas de la cultura, así que eso de hurgar en la escritura impresa en sus atuendos les resulta por completo ajeno. Como a los chicos de su edad les interesa ser como los otros chicos de su edad.

¿Será que a sus padres les interesa también ser como los otros padres? Y así, así, ¿quién descubre donde comienza el hilo de la madeja?

viernes, enero 12, 2007

Con ojos de ave

Es poco frecuente que un reportaje nos abra en vez de horizontes, verticales. Ocurre hoy con la entrevista de El Comercio a Evelyn Merino Reyna. La fotógrafa que ha sobrevolado distintos puntos de la ciudad en un parapente, decidida a ofrecernos su mirada de ave. En unos casos la velocidad de su cámara y en otros su ojo al decidir la composición de lo que ve, operan como los mecanismos que deconstruyen la atención distraída que cualquiera pega a la tierra desde una ventanilla de avión. El resultado es refrescante...y sin ningún colapso comunicativo.


Me ha venido a la memoria un poema un tanto oscuro y a la vez tierno de Jorge Eduardo Eielson de título, "Cuerpo de tierra".Todo lo que veo sobre la tierra/me convence que jamás seré un hombre/ni una mujer ni una hormiga/y ni siquiera una persona educada/no me corto el pelo ni la barba/sino cuando el cielo me lo pide/el cocodrilo es mi hermano querido/las cucarachas mi única familia/comparto con la yerba y con el sapo/el amor a la lluvia con la araña el arte/de levantar castillos de saliva/así avanzo avanzo todavía /generalmente en cuatro patas /encima de dos zapatos/o debajo de un sombrero./

jueves, enero 11, 2007

Eléctrico y pimentoso

El fondo del monitor con el título Calle 54 y el menú donde se ve una mano, dan fe de mi paciencia cada vez que subo un DVD a la Red. Agreguen ustedes lo muy en serio que me he tomado el conocer mi nueva Cybershot. Rippear la edición de una película toma su tiempo, pero una vez establecido el corte se sube el archivo a YouTube y ya.

Con ustedes Chucho Valdés, un virtuoso cubano que participó en la película del español Fernando Trueba, Calle 54. Fue de verdad un poema sobre el sentir caribeño y el jazz latino que obtuvo mucha prensa en el 2000.

Toda su música tiene un sentir eléctrico y pimentoso, como se dice por ahí. A la espera de que el sonido de Chucho les recorra el cuerpo y con la disculpa por el detalle surreal final, (el teclado sigue sonando y Chucho ha retirado sus manos), tengan ustedes un buen jueves.


miércoles, enero 10, 2007

Perú, capital Inca Kola

Podría ocurrirnos. La población francesa de Vergeze, una ciudad que hay que encontrar con lupa en el mapa del país galo, ha decidido reivindicar el nombre de la marca que indirectamente la ha hecho conocida a nivel internacional: El agua natural Perrier. La intención es dejar de llamarse Vergeze y comenzar a ser reconocidos como Perrier. A fin de cuentas, el líquido del producto es extraído de un manantial local que data de tiempos remotos. El pero es que a los dueños de la marca no les hace gracia, así que el asunto se ventila en los tribunales.

No vaya a ser que a alguien se le ocurra proponer reemplazar el nombre de Lima por Inca Kola, la chiclosa bebida nacional, que desde que encontró la fórmula para venderse como light aumentó notablemente sus ventas.

Al decir del publicista argentino Alberto Borrini, la oleada de querer llamarse Nike Rodríguez, Reebook Pérez o Adiddas González arrecia con furor. Hay incluso empresas bisoñas que promueven campañas del tipo, llame a su hijo con el nombre de nuestra marca y recibiriá unos cuantos miles de dólares. Ojo, sólo los diez primeros.

Quo Vadis, digo, o lo que es igual, adonde vamos. Agrego, Yuyachkani, el nombre de la agrupación teatral peruana que en quechua remite a "estoy pensando". ¿Y se puede hacer otra cosa que dejar hacer y dejar pasar el poder del imperio y la globalización?

Toca potenciar el amor por lo propio, la identificación con nuestras grandezas y miserias, aún así, que dan gozo al alma. Por el momento, antes que las ideas grandes y pequeñas, la comida y la bebida locales tienen la palabra.

Imagen: "Los músicos ambulantes" de Yuyachkani

martes, enero 09, 2007

Vamos a educarnos


Me pregunto si tiene todavía sentido afirmar que vivimos en una época en la que lo antiguo se desvanece en el aire. O si la sensación correcta es la de un juego en el que algo cambia para que nada cambie. El tema de la evaluación de los maestros convocada por el gobierno, y finalmente cumplida ayer tras una postergación motivada por la misteriosa desaparición de la primera prueba, ha sacado a relucir mis por qués.

¿Se habrá desvanecido la fantasía de creer que sin acciones en el sector de la educación pública, vamos a surcar la ruta del cambio? Sea ésta la de ver crecer mejores ciudadanos, con trabajo, buenos sueldos y a la vez con mayor responsabilidad, más tiempo libre y por tanto mayor capacidad de disfrute.

La segunda opción. ¿El gobierno y un sector de la prensa han apoyado la evaluación de los maestros sólo como una medida política? ¿No aspiran por tanto, continuar la acción con el empeño de dar un nuevo rostro a la educación en el país?

Me gustaría creer que la publicidad va a volcarse a la idea de un cambio. Vamos a educar/nos. Que los medios celebran el talento infantil, que promueven el gusto por las ciencias y por las artes. Que nos sentimos en conjunto, miembros de una sociedad en la que cabe no sólo denunciar, sino contrastar opiniones.

Hace falta en los colegios un curso sobre como negociar con el otro. ¿Se impondrá esa reforma curricular? Hay quienes consideran más real el imperativo de amar al prójimo como a uno mismo. Siendo el mandamiento tan del reino de los cielos, deja tranquilos a quienes quieren sólo cambiar algo para que nada cambie en la tierra.

No sé cómo he asociado la educación, a la araña del poema de Vallejo. "...Es una araña enorme, a quien impide el abdomen seguir a la cabeza. Y he pensado en sus ojos y en sus pies numerosos...¡Y me ha dado que pena esa viajera!"

Imagen: Louise Bourgeois.

lunes, enero 08, 2007

Baño de miel

Me he levantado con cierto desgano. ¿Por qué? Paso revista a la semana anterior en busca de alguna pista, pero no encuentro nada. Lo mejor será darme con una imagen que me ponga ante la vista mi sensación, me digo. No me pasaba hace tiempo eso de necesitar un referente visual para explicarme, mmm...


Encaje o no la perfección, qué logra hacerlo del todo, algo me dice "In Honey", instalación de Egle Rakauskaite, artista de perfomance que en 1996 expuso su trabajo en el Museo de Arte de Reikiavik.



La mujer se sumergió en un recipiente de miel, su figura hace sombra en la primera imagen, volviéndose visible al espectador sólo a través de un monitor (abajo a la izquierda). El oxígeno llegándole a través de un tubo evoca al cordón umbilical. Rakaustiké ha elegido depender de un recipiente para aludir a la protección del vientre o el seno materno.

Vaya, en el curso de estas líneas me he dado con una alternativa opuesta al baño de miel. "Hacer" opera también como un refugio y hasta genera sus propias imágenes. Diría que en un orden multiráfaga. Hay que entrar en acción...

domingo, enero 07, 2007

Un país cabinero

Estoy en Mala, distrito de la provincia de Cañete, a 90 kilómetros de Lima. He venido a comprar pan. Aclaro que no es que huya de algo ni que se me haya dado por abultar innecesariamente mi gasto de combustible. Es que desde el viernes por la tarde paso unos días en una playa cercana, habiendo prescindido de casi toda tecnología.

Antes de salir del balneario le dije a mi sobrino de diez años si quería acompañarme y sólo obtuve una interrogación: ¿Y ese lugar es "malo"? Le dije que no, pero al parecer desconfió y se quedó. Agreguen ustedes mis horas alejada de la Red y ya.

Me detuve en una cabina de la plaza de Mala, por algo se dice que somos un país cabinero, y me puse a rastrear el origen del término Mala. Hallazgo. Hay quienes dicen que en el muy lejano siglo XVI, el lugar recordó a los españoles la ciudad de Málaga. Otra versión vincula la palabra al aymara, lengua aborigen. Mallao es caña brava, una planta que abunda en el lugar. Sino, Mallac que se refiere a la tez desfalleciente de una persona que no ha probado bocado y acaso esa haya sido la apariencia de los maleños.

No es mi impresòn. Vuelvo a la playa pensando que los pobladores de Mala tienen hoy colores muy vivos. La chica que atiende la sala de PCés llamada "El Parque", sabe lo suyo. Me dijo que había estudiado Computación e Informática; afuera un grupo de pobladores iza la bandera al ritmo del himno patrio y en cuanto al pan, corro a probarlo, no vaya a ser que se enfríe.



Para el camino son las uvas que encontré en la puerta de la panadería, una riquísima producción de la zona.

jueves, enero 04, 2007

Cuando pasa un ángel


La frase ha pasado un ángel me recuerda a mi abuela. Solía usarla cuando se reunía con sus amigas. Las señoras jugaban cartas y a mí siendo niña me gustaba observarlas. Me preguntaba sin embargo, por qué no veía yo al ángel. Un día descubrí que era una expresión. Si recuerdan ustedes, el ángel exterminador ejecutó a los primogénitos egipcios y dejó al mundo en silencio.

Buñuel, el cineasta español, ironizó sobre el lado siniestro de la criatura celestial. Llamó "El angel exterminador" (1962) a uno de sus trabajos. Muy laureada en su época, la película trata de una cena a la que los invitados han llegado libremente, pero que poco a poco les hace sentir prisoneros.

El grupo no habla del asunto para encontrar alternativas, una de ellas muy simple. Tienen las puertas a su alcance, así que podrían abrirlas y salir, pero algo, no se sabe qué, los detiene. El gesto surrealista del silencio está presente. Todo apunta a un desespero que hace aflorar las malas maneras y con ellas el lado más animal de nuestra especie.

Hace poco reencontré una novela corta sobre el tema. El argumento relata la intención de una pareja de hacer un libro teniendo como personaje al silencio. No lo llegan a lograr, pero el lector se involucra en la vida de los escritores. La risa sube a escena como remedio para el silencio que el autor, Pedro Zarralucki, hace coincidir con la ausencia y el silencio.

Me encanta la foto de Garry Winogrand que el editor ha usado en la portada y que he colgado arriba. Me ha llegado a erizar los pelos al pensar que la risa acaso sea un intento serio de evitar el silencio.

miércoles, enero 03, 2007

Lo que nos hacen los objetos


He estado en un seminario sobre cámaras digitales. La Sony ofrecía información técnica de su línea Cyber-shot y pensé que era eso o arreglármelas intuitivamente con el manejo de la N2, un regalo sorpresa que me hizo L.P. en Navidad.
Las instrucciones del especialista me han provisto de un léxico. Ahora hablo de balance de luminosidad, enfoque multicentro o imágenes en ráfaga, pero las dos horas que duró la exposición experimenté la sinrazón tecnológica. El expositor, más interesado en cumplir su plan de exposición que en adecuarse al ritmo de sus oyentes; no era sin embargo sino un eslabón de la suma de enredos que suelen iniciar los diseñadores de artefactos.

Donald Norman, autor de "La psicología de los objetos cotidianos" lo dice con gracia: Al diseñador de tecnología le gusta la complejidad. Le es propio atiborrar de elementos cuanto dispositivo sale de sus manos.

Constatémoslo. Raras veces nos poner a pensar en las características de un aparato, como no sea para intentar hacerlo andar. Nos convertimos así al decir de Norman, en cómplices del culto al adelanto técnico. Su propuesta tiene que ver con manifestar al gremio de diseñadores que estamos en contra de una tecnología cuya curva de complejidad tiene forma de U: para pensantes o para bobos. Súmese que no debieran seguir saliendo al mercado artefactos con manuales de instrucción con tantas páginas como la Biblia.

Asimov, el escritor de ciencia ficción se ha sumado a la cruzada de Norman. Por fin alguien se revuelve contra el mundo de los objetos, dice. Está convencido de que todos somos víctimas de la perversidad natural de los objetos inanimados.

En cuanto a la suscrita y su N2, voy a proponerle volvernos inseparables. Mi trato, no veo otra salida, incluye pegarme al número telefónico de la Sony.

-¿Aló?, ¿responde servicio al cliente?
-Si.
-¡X%"jzdgt&mgwq!

Imagen: J. Carelman

martes, enero 02, 2007

Madeinperú

"Madeinusa", la película de la peruana Claudia LLosa ha tocado la médula del pensar madeinperú. Basta que haya puesto sobre el tapete el tema de la función social del arte.

Para quienes no la vieron, el título de la película proviene del nombre de una adolescente que concentra la idealización de su familia por el país del norte. Madeinusa vive en el pueblo de Manayaycuna, un lugar apartado que se prepara para celebrar el tiempo santo cristiano. Jesús ha muerto en la cruz y con ello ha entrado en receso su función como juez. Hay lugar por tanto, para el desenfreno y la fiesta incluído el incesto.

La protagonista va a perder la virginidad a manos de su padre, autoridad del pueblo que la prefiere a su otra hija. La madre abandonó a su familia al huir a la capital, quien sabe si lo hubiera evitado. Sucede sin embargo, que un limeño de paso por el pueblo y que debe quedarse por razones fortuitas resulta el elegido para la iniciación sexual de Madeinusa. Se condena el trabajo de LLosa, porque el pueblo del relato guarda parecido con cualquier poblado de nuestros Andes. ¿Acaso nada mejor ocurre en nuestra sufrida serranía, que el hecho de esperar la llegada del viernes santo y el sábado de gloria para liberar los instintos? ¿Qué ideología subyace al relato?, se ha preguntado. En esta línea se considera que la realizadora repite la visión denigradora del conquistador sobre el indigena. Es racista.

Me pregunto si quienes así piensan, demandan también el cierre de universidades y escuelas donde se enseña cine, hasta que el país se constituya verdaderamente como nación. ¿En materia de arte va a algún lado esa urgencia de manifestarse como latinoamericanos concientes de la postergación de las grandes mayorías? ¿Para detener toda producción artística que no se ajuste a qué?

El punto me lleva a Tolstoi para quien el arte debía ser una forma de comunicar emociones frescas al conjunto de la humanidad. Descartaba la producción de élite, rubro en el que paradójicamente hay que ubicar sus propias obras. ¿Es el mismo sentimiento religioso del novelista ruso el que late detrás de la crítica a "Madeinusa"?

Con esta lógica, el cine tendría que quedar en manos de nuestros acuciosos científicos sociales. Sólo ellos y sus acabados productos fílmicos podrían permitirnos comprender la supuesta superficialidad de "Madeinusa".

Termino recordando que el arte identificado con su tiempo se sostiene en un imaginario plural que no tiene por que excluir el de LLosa y sus colaboradores. Tal vez el incremento de la producción cinematográfica sea lo que debamos extrañar. Es un voto a la libertad de imaginar y contrastar versiones.

Por último, a quienes les preocupa la imagen del país y el turismo, cabe recordarles que Sofocles y su "Edipo" nunca han sido un impedimento para querer visitar las islas griegas. Y que en épocas más recientes, tampoco "Amores perros", ha detenido los sueños de una visita a Cancún.

lunes, enero 01, 2007

Solo danza

Un fragmento de la pieza de Jiri Kylian, coreógrafo de origen checo con The Netherlands Dans Theater, "Ángeles caidos"(1996) me permite mencionar mi fantasía sobre la usabilidad del cuerpo. Si la educación incluyera en sus planes, la elasticidad, el ritmo y el deseo de expresar corporal, otros humanos seríamos.

Se ve que comienzo el año con el mismo ánimo "cultureta". Para lo que tenga de vital, ojalá sigamos en contacto.