La tal isla es un vertedero en Porto Alegre, de allí que vayan y vengan camiones que descargan sus tolvas en una zona también aprovechada como criadero de cerdos. Los propietarios de las porquerizas aprovechan los desechos para criar a sus animales. He aquí que lo que no les sirve es recogido por los mencionados humanos paupérrimos.
La narración del corto está hilvanada por la producción de tomates con términos de pulcritud científica (todos los humanos tenemos un teleencéfalo altamente desarrollado y el pulgar oponible, sin embargo...).Ciertamente un documental preocupado por el ambiente y sus habitantes que se transmite en un sólo aliento al espectador. Con varios premios en su haber, el corto fue criticado desde posturas antagónicas. Para unos resultaba un "manual para analfabetos" o "extraterestres" que no sabían nada de los humanos. Para otros, "una película política que hace reír con sarcasmo del inicio al fin".
Cosa de ver "La isla de las flores", corto que encontré hoy en Lado B, una cyber publicación que recorro a menudo.
Imagen: Daniel Canogar.
2 comentarios:
hey canogar m encanta, buscando imágenes suyas llegue a su blog, sta muy fino
son las casualidades...gracias por elcomentario Kathy
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