miércoles, abril 02, 2008

¡Importan los héroes!


La mil seiscientas entradas disponibles para asisitir a la función en la que el tenor peruano Juan Diego Florez hizo el papel del duque de Mantua de Rigoletto, la ópera de Verdi, sencillamente se agotaron. La puesta en escena del lunes pasado en un teatro del puerto del Callao, localidad ubicada a veinte minutos en carro del Centro Histórico de Lima, movilizó a aficionados al género y a todo aquel que le gusta estar ´donde hay que estar´. Si luego sale en la foto muchísimo mejor.

La afición por la ópera en Lima ha subido unos puntos así como en en materia de deportes lo ha hecho el surf. No en vano Sofía Mulanovich, tablista local obtuvo un título mundial y se mantiene en el ranking de las mejores corredoras de olas del globo.

Que se levanten voces de protesta contra las prerrogativas de Florez quien parece haber conseguido ´lo que hay que tener´: éxito, dinero y hasta una novia guapa con la que se casará el cinco de este mes en la Catedral, es parte de la dinámica de la construcción de un mito. ¿Así que se cerrarán las calles adyacentes a la Catedral donde se realizará la boda del cantante lírico? ¿Y eso por qué?, he leído en un blog cuyas líneas dejan entrever el color amarillo de la envidia.

Como ocurre en la ficción de Rigoletto, el bufón del palacio del duque de Mantua, toda historia tiene sus protagonistas y antagonistas. La libertad de elegir en donde se coloca uno, responde a una historia personal como a las tendencias que parecen imponerse en el entorno sociocultural.

Confieso que aunque no disfruto en particular de la ópera, me excluyo de esa suerte de canibalismo local que despierta el despuntar de un héroe. No me interesa alardear de persona justa, sino subrayar lo necesitados que estamos de figuras con méritos.

Y claro que me hubiera gustado oir a Juan Diego Florez en ´La donna é mobile´, pero es que no me gusta estar ´donde hay que estar.´¡Gulp!

Imagen: Lorena Aranda y Juan Diego Florez, envío de J.C. Alvarado.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Realmente, Lima no esta preparada para la Opera aún, sino para el alboroto y la foto en la revista, el vistido y la gente que ira. Es una pena, desgraciadamente es la realidad. Esto sin restarle méritos a J.D.Flórez que realmente posee una bella voz y muy bien estudiada además. Ojalá que si empezó la ópera así continúe.
Mariella

Anónimo dijo...

Me encantó eso de que la libertad tiene que ver con elegir donde se coloca uno...
No elijo la Opera para nada, pero celebro el triunfo de un compatriota con méritos propios... Y que coma perdices y las disfrute!!
Olga